Comparto una carta que me escribió mi marido (a petición mía) sobre que sus sentimientos y deseos para compartirla con vosotras. Sé que este tipo de explicaciones os sirven de ayuda para entender algunas cosas reales. Le pedí la escribiera como si se la contara a un amigo de confianza sin tabúes. Espero os sirva de ayuda. A mi me reveló algunas cosas que no apreciaba. Aprovecho para declarar que Yo también le amo por cómo es. Gracias amor !
Te quiero contar mi relación con mi mujer y lo que yo deseo y disfruto. Cuando nos conocimos ella me cautivó por su belleza pero más aún por su seguridad en ella misma. Tuvimos sexo de inmediato. Yo no tenia experiencia previa, y ella había salido con varios chicos ya. Según me contó había tenido sexo con tres anteriores a mi. Al principio el sexo para mi se limitaba a practicar sexo directamente experimentando lo tipico que los jóvenes quieren experimentar. Recuerdo que al principio no me gustaba trabajar con mi boca. Siempre lo hacíamos con preservativo, y nunca practicamos nada especial. Ella se notaba que tenia mas experiencia que yo, y siempre llevaba la iniciativa. Ya por entonces recuerdo que a veces cuando lo hacíamos le preguntaba por sus relaciones anteriores, y ella me lo contaba y nos corríamos hablando de ello. El imaginarla siempre me ha puesto muy caliente.
Del sexo anal ni hablar, de felaciones hasta el final, ni hablar. Nuestro sexo era lo más normal del mundo, pero con mucha imaginación. Nuestras fantasias eran hacerlo en un jacuzzi, en la playa, etc. Recuerdo que sólo trataban de eso. Lugares.
Vimos algunas películas porno, pero normalmente no pasábamos de la primera escena, porque nos metíamos al lio. Nunca de ninguna tematica especial. Eso si. Nos gustaba mas el cine erotico no tan explicito. Recuerdo que alguna película de Emmanuelle, a mi mujer le excitaba la idea. Y la película que recuerdo con mucho cariño y que supuso un antes y un después fue La proposición Indecente. El hecho de ceder a tu mujer a tener sexo por dinero, a mi me encendió. No me gustó el final de la película, pero después de eso lo hablamos abiertamente. Mi mujer no aceptaba abiertamente que lo haría si se diera el caso, pero le excitaba la idea, y recuerdo que me decía, es que si me lo pide Robert Redford lo hago gratis. Así que así poco a poco íbamos avanzando. Recuerdo la primera vez que me hizo una mamada total, porque no me lo esperaba. Siempre se retiraba a tiempo, pero esa vez sin esperarmelo lo trago todo, y me beso después. Nunca me había besado con una corrida recién en su boca y no me desagradó porque pude comprobar que no había nada en su boca. Fue su manera de demostrarme que se lo había tragado. Hasta ese momento el semen era tabú casi. Pero recuerdo que siempre pensaba que porque a ellas les debería de gustar y a nosotros ni olerlo. Eso no era justo.
Asi que poco a poco el semen iba entrando en nuestra relacion. Un dia tambien sin previo aviso, ella y despues de una corrida en su boca, me besa. Yo pensaba que se lo habia tragado y va y me lo suelta en mi boca entero. No me los esperaba pero no me desagradó, porque estuvimos besandonos un rato hasta que me lo tragué. Ella me miraba con cara de picara y satisfacción. Aquel fue otro momento tabu que derrumbé de mi mente. No era tan malo como habia imaginado.
El sexo anal poco a poco tambien fue entrando en juego (con ella) y lo practicamos de vez en cuando. Por suerte no tengo un pene muy grande. No está mal de tamaño pero no es de los grandes, y eso tambien tiene sus ventajas.
Recuerdo que un año (deberíamos llevar unos cinco años casados), cuando se fue a la cena de navidad de la empresa, le di un preservativo, y le dije: sobre todo, seguridad. Ella me trato de loco, y me dijo que no necesitaba eso, y me lo devolvió. Pero recuerdo aquella noche que yo no dormi y me masturbe varias veces imaginándomela. Creo que ahi entro en mi la semilla de lo que ahora vivimos.
Poco a poco, a medida que avanzábamos, nuestras fantasias también lo hacían, y íbamos avanzando con temas de dominación suave, roles de personajes, etc. Nuestro sexo siempre fue bueno, y cada vez tenia mas importancia los juegos previos. Ella se cuidaba y tenia un cuerpo que desataba pasiones, y eso lo sabia yo, y me gustaba.
Recuerdo que en los embarazos, había una epoca de sexo inexistente, pero luego una epoca de sexo desinibido por parte de ella, y mas lujuriosa de lo normal, asi que recuerdo los tres embarazos como etapas buenas sexuales. Ahi es donde a ella le excitaba mucho el tema anal.
Poco a poco fue entrando el tema de los trios en la conversacion. Es curioso que nunca me he imaginado un trio con dos mujeres. Siempre los imaginaba con mi mujer como centro del placer y del deseo. Lo hablabamos pero ella decia que no necesitaba a mas de uno. Que conmigo era feliz. Un dia ella fue al gimnasio y le toco un monitor nuevo que le tiro los trastos. A ella le gustaba y aquella noche mientras haciamos el amor, me lo contó. De esa manera nos imaginamos que el estaba con nosotros, e hicimos un trio virtual. Mi mujer me preguntaba si me gustaba mirar. ¿A qué hombre no le gusta? Asi que creo ahi empezó todo en mi. Poco a poco mientras iba mirando paginas con fotos eroticas o porno, fui dandome cuenta que entraba en temas de cornudos. De vez en cuando cuando me gustaba una foto se la enviaba a mi mujer, y casi siempre me resondia con algo positivo.
Nunca habiamos hablado del tema de cornudos muy abiertamente, y cuando lo haciamos siempre decia que no necssitaba nada mas. Yo le repetia que no le pedia que hiciera nada, pero que si un dia salia por ahi y alguien le gustaba, que tenia mi permiso. Pero que me lo contara. Ella decia que si hacia algo con alguien seria porque sentiria algo por aquel y que igual seria peligroso. Ahi quedaba todo. Fueron pasando los años. Seguíamos teniendo buen sexo cada vez mas distanciado por las obligaciones diarias. Eso si, cada vez el sexo estaba mejor preparado. Yo reservaba hoteles con encanto y alli aprovechábamos para desquitarnos de todo.
Siempre me ha gustado comprarle ropa. Tengo buen gusto y de vez en cuando le compro. A ella le encanta. Cada vez le compro ropa más sexy donde deja entrever sus atributos. No hay nada mas placentero que ver como otros hombres se giran a mirar a tu mujer. Se que a otros les produce un sentimiento de celos, pero a mi me produce excitación. Aveces jugábamos con mi mujer a pasear, pero ella andaba unos cuantos metros por delante y yo me daba cuenta de las miradas que desataba.
Luego parábamos a tomar un cafe y se lo contaba y ella se ruborizaba.
Así paso el tiempo hasta que ocurrió. Recuerdo una cena de empresa. Ella salió. Yo como casi siempre me quedé excitado e imaginando cosas. Cuando regresó, yo medio dormía. recuerdo que me dijo "tengo que contarte algo". Estaba entre excitada y asustada. Supe en aquel momento que algo importante había pasado. Me explicó, y yo me excité. La acaricié, porque para mi era un signo de confianza muy grande que me confesara que había hecho algo con otro hombre. La amaba por ello.
Hicimos el amor como hacia tiempo que no pasaba. La deseaba con locura.
Al dia siguiente lo hablamos. Dijo que no volvería a pasar. Se notaba arrrepentida. La abracé, y le dije que no importaba. Que ella eras libre, siempre y cuando no me lo ocultara. Que la amaba por ello. Que queria se sientiera plena mujer libre. Pero que le pedia discrecion y seguridad.
Ese fue el inicio de nuestra nueva vida como pareja. Mas unidos aun. Tardó un tiempo en tener otra relación fuera. Nunca la presioné. Quería que se sintiera comoda. De esto hace unos cuantos años. Lejos de enfriarse nuestra relación se ha fortalecido. A mi me excita mucho su placer. Siempre ha actuado con seguridad. Al principio pusimos un anuncio, pero solo salían chulos, machos , etc que no se que se pensaban. Así que abandonamos ese mundo. Ahora cuando viajamos nos sentimos mas libres. Si conocemos a alguien y nos gusta a los dos, pues adelante. De nuestro entorno no hemos tocado a casi nadie, porque no se como se lo tomarian. Solo un par de amigos saben de esto. Hemos ido a un local liberal un par de veces, pero no nos va mucho. Nos cortamos con el ambiente, porque buscamos algo mas natural. A ella le gusta provocarme. A veces vamos separados a las discotecas, o ella va antes que yo. Depende del dia. Nos gusta jugar mucho. El año pasado tuvo un amigo de confianza y lo hacían sin preservativo (lo odiamos), pero lo hacían sin porque él no es un Don Juan. Ahi es donde empezamos a jugar con su coño recién follado, y a mi me encanta, porque a ella la vuelve loca que le haga un trabajo oral después de.
Con este amigo un par de veces hicimos un trio. Al principio no muy bien. El disfrute es igual que en la pareja, hasta que no hay compenetración cuesta disfrutarlo a tope. Ahora es mejor. Él ha aprendido a jugar tambien papeles de roles, y eso hacemos. A veces , soy yo el sumiso, a veces es ella, aveces ella es una prostituta, etc. Imaginación al poder. Cuando tenemos sexo, pasamos horas o incluso días dentro de un juego de excitación.
A mi me encantaría verla en un gangbang rodeada de muchos hombres y que se corrieran encima de ella, pero eso nos da bastante corte, de momento. Nos gusta llevar la cosa con discreción.
Nunca se me ha pasado por la cabeza serle infiel, a pesar de haber tenido oportunidades. El otro día me preguntó si me gustaría hacer un trio con ella y otra mujer. La verdad nunca lo he planteado, pero si me gusta la idea de ser un juguete sumiso y estar al servicio de dos mujeres. Me gusta jugar a sumisión con frecuencia. Cuando ella se viste de negro y con zapatos de tacón, se me eriza el bello. Si eso fuera con dos mujeres, creo que me correria en el momento. Me encantaría vivirlo, pero veo difícil encontrar a otra mujer.
Otras veces, me gusta el papel de Amo, y tenerla a ella a mi servicio. Algunas veces, tardo un tiempo en conseguir ahorrar una buena cantidad de dinero, y busco un hotel bueno. Ella ha ido antes, y adopta el rol de prostituta de lujo. Yo he llegado, y he pagado una buena cantidad de dinero y hemos jugado a eso. A ella, le encanta porque se transforma y satisface nuestra fantasia, y encima sale con una buena cantidad de dinero. Lástima que no puedo hacerlo más a menudo por temas económicos.
En resumen. Me gusta que mi mujer se sienta libre. Eso es lo que más. La amo. Pero me gusta por la confianza que nos tenemos. Me gusta que se vista provocativa sin pasarse. Eso me excita. Me gusta cuando sale de fiesta conmigo, o sin mi. Nuestra sexualidad es mejor ahora que nunca. No cambiaría mi vida por otra. A veces me pregunta alguno de nuestros "amigos". ¿No tienes miedo que se enamore de otro? . Claro que si. Pero este miedo no es más grande que si fuéramos un matrimonio normal. ¿O ese temor desaparece en una pareja normal? Yo creo que los celos son eso, el temor a que te deje. Yo estoy seguro de mi. Le ofrezco lo que creo ella quiere en la vida. Amor, confianza, respaldo, tranquilidad, apoyo, etc, y sé que ella lo tendrá difícil para encontrar otro mejor.
¿No decimos los hombres que somos capaces de separar sexo y amor?
Te quiero contar mi relación con mi mujer y lo que yo deseo y disfruto. Cuando nos conocimos ella me cautivó por su belleza pero más aún por su seguridad en ella misma. Tuvimos sexo de inmediato. Yo no tenia experiencia previa, y ella había salido con varios chicos ya. Según me contó había tenido sexo con tres anteriores a mi. Al principio el sexo para mi se limitaba a practicar sexo directamente experimentando lo tipico que los jóvenes quieren experimentar. Recuerdo que al principio no me gustaba trabajar con mi boca. Siempre lo hacíamos con preservativo, y nunca practicamos nada especial. Ella se notaba que tenia mas experiencia que yo, y siempre llevaba la iniciativa. Ya por entonces recuerdo que a veces cuando lo hacíamos le preguntaba por sus relaciones anteriores, y ella me lo contaba y nos corríamos hablando de ello. El imaginarla siempre me ha puesto muy caliente.
Del sexo anal ni hablar, de felaciones hasta el final, ni hablar. Nuestro sexo era lo más normal del mundo, pero con mucha imaginación. Nuestras fantasias eran hacerlo en un jacuzzi, en la playa, etc. Recuerdo que sólo trataban de eso. Lugares.
Vimos algunas películas porno, pero normalmente no pasábamos de la primera escena, porque nos metíamos al lio. Nunca de ninguna tematica especial. Eso si. Nos gustaba mas el cine erotico no tan explicito. Recuerdo que alguna película de Emmanuelle, a mi mujer le excitaba la idea. Y la película que recuerdo con mucho cariño y que supuso un antes y un después fue La proposición Indecente. El hecho de ceder a tu mujer a tener sexo por dinero, a mi me encendió. No me gustó el final de la película, pero después de eso lo hablamos abiertamente. Mi mujer no aceptaba abiertamente que lo haría si se diera el caso, pero le excitaba la idea, y recuerdo que me decía, es que si me lo pide Robert Redford lo hago gratis. Así que así poco a poco íbamos avanzando. Recuerdo la primera vez que me hizo una mamada total, porque no me lo esperaba. Siempre se retiraba a tiempo, pero esa vez sin esperarmelo lo trago todo, y me beso después. Nunca me había besado con una corrida recién en su boca y no me desagradó porque pude comprobar que no había nada en su boca. Fue su manera de demostrarme que se lo había tragado. Hasta ese momento el semen era tabú casi. Pero recuerdo que siempre pensaba que porque a ellas les debería de gustar y a nosotros ni olerlo. Eso no era justo.
Asi que poco a poco el semen iba entrando en nuestra relacion. Un dia tambien sin previo aviso, ella y despues de una corrida en su boca, me besa. Yo pensaba que se lo habia tragado y va y me lo suelta en mi boca entero. No me los esperaba pero no me desagradó, porque estuvimos besandonos un rato hasta que me lo tragué. Ella me miraba con cara de picara y satisfacción. Aquel fue otro momento tabu que derrumbé de mi mente. No era tan malo como habia imaginado.
El sexo anal poco a poco tambien fue entrando en juego (con ella) y lo practicamos de vez en cuando. Por suerte no tengo un pene muy grande. No está mal de tamaño pero no es de los grandes, y eso tambien tiene sus ventajas.
Recuerdo que un año (deberíamos llevar unos cinco años casados), cuando se fue a la cena de navidad de la empresa, le di un preservativo, y le dije: sobre todo, seguridad. Ella me trato de loco, y me dijo que no necesitaba eso, y me lo devolvió. Pero recuerdo aquella noche que yo no dormi y me masturbe varias veces imaginándomela. Creo que ahi entro en mi la semilla de lo que ahora vivimos.
Poco a poco, a medida que avanzábamos, nuestras fantasias también lo hacían, y íbamos avanzando con temas de dominación suave, roles de personajes, etc. Nuestro sexo siempre fue bueno, y cada vez tenia mas importancia los juegos previos. Ella se cuidaba y tenia un cuerpo que desataba pasiones, y eso lo sabia yo, y me gustaba.
Recuerdo que en los embarazos, había una epoca de sexo inexistente, pero luego una epoca de sexo desinibido por parte de ella, y mas lujuriosa de lo normal, asi que recuerdo los tres embarazos como etapas buenas sexuales. Ahi es donde a ella le excitaba mucho el tema anal.
Poco a poco fue entrando el tema de los trios en la conversacion. Es curioso que nunca me he imaginado un trio con dos mujeres. Siempre los imaginaba con mi mujer como centro del placer y del deseo. Lo hablabamos pero ella decia que no necesitaba a mas de uno. Que conmigo era feliz. Un dia ella fue al gimnasio y le toco un monitor nuevo que le tiro los trastos. A ella le gustaba y aquella noche mientras haciamos el amor, me lo contó. De esa manera nos imaginamos que el estaba con nosotros, e hicimos un trio virtual. Mi mujer me preguntaba si me gustaba mirar. ¿A qué hombre no le gusta? Asi que creo ahi empezó todo en mi. Poco a poco mientras iba mirando paginas con fotos eroticas o porno, fui dandome cuenta que entraba en temas de cornudos. De vez en cuando cuando me gustaba una foto se la enviaba a mi mujer, y casi siempre me resondia con algo positivo.
Nunca habiamos hablado del tema de cornudos muy abiertamente, y cuando lo haciamos siempre decia que no necssitaba nada mas. Yo le repetia que no le pedia que hiciera nada, pero que si un dia salia por ahi y alguien le gustaba, que tenia mi permiso. Pero que me lo contara. Ella decia que si hacia algo con alguien seria porque sentiria algo por aquel y que igual seria peligroso. Ahi quedaba todo. Fueron pasando los años. Seguíamos teniendo buen sexo cada vez mas distanciado por las obligaciones diarias. Eso si, cada vez el sexo estaba mejor preparado. Yo reservaba hoteles con encanto y alli aprovechábamos para desquitarnos de todo.
Siempre me ha gustado comprarle ropa. Tengo buen gusto y de vez en cuando le compro. A ella le encanta. Cada vez le compro ropa más sexy donde deja entrever sus atributos. No hay nada mas placentero que ver como otros hombres se giran a mirar a tu mujer. Se que a otros les produce un sentimiento de celos, pero a mi me produce excitación. Aveces jugábamos con mi mujer a pasear, pero ella andaba unos cuantos metros por delante y yo me daba cuenta de las miradas que desataba.
Luego parábamos a tomar un cafe y se lo contaba y ella se ruborizaba.
Así paso el tiempo hasta que ocurrió. Recuerdo una cena de empresa. Ella salió. Yo como casi siempre me quedé excitado e imaginando cosas. Cuando regresó, yo medio dormía. recuerdo que me dijo "tengo que contarte algo". Estaba entre excitada y asustada. Supe en aquel momento que algo importante había pasado. Me explicó, y yo me excité. La acaricié, porque para mi era un signo de confianza muy grande que me confesara que había hecho algo con otro hombre. La amaba por ello.
Hicimos el amor como hacia tiempo que no pasaba. La deseaba con locura.
Al dia siguiente lo hablamos. Dijo que no volvería a pasar. Se notaba arrrepentida. La abracé, y le dije que no importaba. Que ella eras libre, siempre y cuando no me lo ocultara. Que la amaba por ello. Que queria se sientiera plena mujer libre. Pero que le pedia discrecion y seguridad.
Ese fue el inicio de nuestra nueva vida como pareja. Mas unidos aun. Tardó un tiempo en tener otra relación fuera. Nunca la presioné. Quería que se sintiera comoda. De esto hace unos cuantos años. Lejos de enfriarse nuestra relación se ha fortalecido. A mi me excita mucho su placer. Siempre ha actuado con seguridad. Al principio pusimos un anuncio, pero solo salían chulos, machos , etc que no se que se pensaban. Así que abandonamos ese mundo. Ahora cuando viajamos nos sentimos mas libres. Si conocemos a alguien y nos gusta a los dos, pues adelante. De nuestro entorno no hemos tocado a casi nadie, porque no se como se lo tomarian. Solo un par de amigos saben de esto. Hemos ido a un local liberal un par de veces, pero no nos va mucho. Nos cortamos con el ambiente, porque buscamos algo mas natural. A ella le gusta provocarme. A veces vamos separados a las discotecas, o ella va antes que yo. Depende del dia. Nos gusta jugar mucho. El año pasado tuvo un amigo de confianza y lo hacían sin preservativo (lo odiamos), pero lo hacían sin porque él no es un Don Juan. Ahi es donde empezamos a jugar con su coño recién follado, y a mi me encanta, porque a ella la vuelve loca que le haga un trabajo oral después de.
Con este amigo un par de veces hicimos un trio. Al principio no muy bien. El disfrute es igual que en la pareja, hasta que no hay compenetración cuesta disfrutarlo a tope. Ahora es mejor. Él ha aprendido a jugar tambien papeles de roles, y eso hacemos. A veces , soy yo el sumiso, a veces es ella, aveces ella es una prostituta, etc. Imaginación al poder. Cuando tenemos sexo, pasamos horas o incluso días dentro de un juego de excitación.
A mi me encantaría verla en un gangbang rodeada de muchos hombres y que se corrieran encima de ella, pero eso nos da bastante corte, de momento. Nos gusta llevar la cosa con discreción.
Nunca se me ha pasado por la cabeza serle infiel, a pesar de haber tenido oportunidades. El otro día me preguntó si me gustaría hacer un trio con ella y otra mujer. La verdad nunca lo he planteado, pero si me gusta la idea de ser un juguete sumiso y estar al servicio de dos mujeres. Me gusta jugar a sumisión con frecuencia. Cuando ella se viste de negro y con zapatos de tacón, se me eriza el bello. Si eso fuera con dos mujeres, creo que me correria en el momento. Me encantaría vivirlo, pero veo difícil encontrar a otra mujer.
Otras veces, me gusta el papel de Amo, y tenerla a ella a mi servicio. Algunas veces, tardo un tiempo en conseguir ahorrar una buena cantidad de dinero, y busco un hotel bueno. Ella ha ido antes, y adopta el rol de prostituta de lujo. Yo he llegado, y he pagado una buena cantidad de dinero y hemos jugado a eso. A ella, le encanta porque se transforma y satisface nuestra fantasia, y encima sale con una buena cantidad de dinero. Lástima que no puedo hacerlo más a menudo por temas económicos.
En resumen. Me gusta que mi mujer se sienta libre. Eso es lo que más. La amo. Pero me gusta por la confianza que nos tenemos. Me gusta que se vista provocativa sin pasarse. Eso me excita. Me gusta cuando sale de fiesta conmigo, o sin mi. Nuestra sexualidad es mejor ahora que nunca. No cambiaría mi vida por otra. A veces me pregunta alguno de nuestros "amigos". ¿No tienes miedo que se enamore de otro? . Claro que si. Pero este miedo no es más grande que si fuéramos un matrimonio normal. ¿O ese temor desaparece en una pareja normal? Yo creo que los celos son eso, el temor a que te deje. Yo estoy seguro de mi. Le ofrezco lo que creo ella quiere en la vida. Amor, confianza, respaldo, tranquilidad, apoyo, etc, y sé que ella lo tendrá difícil para encontrar otro mejor.
¿No decimos los hombres que somos capaces de separar sexo y amor?
Comentarios
Mi enhorabuena
Aurelio
Amikeco.
seguir asi y no cambies, gracias.
Att trendemedianoche69@gmail.com
Hecho de menos que no relatara como fue esa primera vez, como fue vuestra conversación cuando le dijiste que era cornudo y como se sintió él al saber que por fin era un cornudo.